Mucha gente dice que si tienes un blog, debes publicar siempre. ¡De eso, NADA!
Somos personas y no estamos conectadas en piloto automático.
Además, es necesario un tiempo de descanso, salir de la rutina, regalarse un tiempo de análisis y reflexión tanto personal como laboral y de merecidas vacaciones.
También puede que necesites tiempo para recuperarte porque nadie está exento a enfermarse, sentirse débil, triste e incluso deprimido… Ojo, esto último mejor si es circunstancial, porque estos estados tan indeseados, si les buscamos el lado positivo, nos ayudan a detener el frenético ritmo de nuestras vidas y a reflexionar sobre nuestros más profundos e íntimos deseos y anhelos.
Ya sé, Google no perdona y si tu blog deja de tener movimiento, el ranking de tu web baja posiciones y puedes desaparecer de la tan deseada primera página en los resultados de búsqueda.
Sin embargo, ser esclavo de tu blog te resta calidad de vida. (Twittea esto)
Además hay veces que las ideas se acaban, no sabes que escribir y tienes la sensación de estar como un hámster, dando vueltas sobre los mismos temas… y eso puede ser peor porque cuando la gente ve que no tienes nada nuevo que aportar, dejan de seguirte, de leerte y se dan da baja de tu lista de suscriptores…
Quizás tus prioridades han cambiado…
te casaste, ahora tienes hijos y quieres pasar más tiempo con tu familia, buscas nuevas alianzas, vas a iniciar una gira de conferencias, quieres reorientar tu carrera profesional o negocio, quieres crear otro tipo de ingresos, puede que sufras alguna dolencia, te mudaste a otro país, perdiste un ser querido, te separaste, nació tu primer nieto o qué se yo…
Si te tomas un tiempo, puedes dar un enfoque fresco a tu blog y si el posicionamiento te produce mucha angustia, también puedes compartir tus artículos más leídos y programarlos con tu autoresponder (yo uso MailChimp y estoy encantada) o pagar a alguien para que te redacte algunos post mientras te tomas tu tan merecido descanso.
El descanso, lo decides tú…
Muchos agarran las maletas y se van de viaje, otros la mochila y se van de acampada, hay quienes disfrutan pasando algunos días en su pueblo, otros aprovechan para dedicarse a sus hobbies, algunos a formarse y otros simplemente se dedican a hacer nada.
Y todo eso está muy bien, porque las personas somos vivencias, qué vamos a contar si no aprendemos de la universidad de la vida y del contacto con otras personas, otros lugares y otras situaciones…
Para mí, el verano es la época ideal para descansar, crear y reflexionar y lo hago, perdiéndome en la montaña y haciendo rutas de senderismo. Además, es terapéutico porque nada como la paz y tranquilidad que da ponerse frente a tanta maravilla de la naturaleza.
Esta es alguna de las grandes ventajas de trabajar de forma independiente, porque puedes adaptar tu tiempo a tu estilo de vida.
Por suerte tuve buenos mentores que me enseñaron que disfrutar de tiempo de auto-cuidado y de actividades fuera del trabajo son imprescindibles para desconectar, energizarse y estar más creativos.
¿Ahora entiendes por qué es bueno dejar de publicar un tiempo en tu blog para descansar y reflexionar?
Así que a ponerse las pilas, la cuestión es decidirse y hacer que las cosas pasen. Esto mismo le pasó a una de mis clientes, Gloria. Ella es asesora editorial y cultura. Se tomó un tiempo de reflexión y análisis para diseñar la estrategia de su negocio; y creó ruizdealoza, una web con el puro toque personal de Gloria, un sitio completamente distinto a todas las editoriales que puedas ver por la red, de la cual me siento orgullosa porque también tiene un poquito de mí 🙂
Ahora me despido de artículos hasta septiembre, no sin antes desearte que disfrutes de una temporada de verano fantástica, que hagas lo que te dé la gana, o simplemente que no hagas nada, que descanses todo lo que puedas, que tengas nuevas vivencias, que planifiques el éxito de tu negocio o des el gran paso de iniciar uno nuevo y que todo lo que hagas en tu vida te lleven a ser cada día un poquito más feliz
Un fuerte abrazo,
Silvia..
Me ha gustado mucho el artículo, ya que por motivos personales no he podido publicar estas últimas semanas y estaba preocupada. Pero con este artículo me he dado cuenta que me va a venir bien este descanso obligado para generar nuevas ideas.
Ya lo creo Nerea, ánimos y a recargar pilas. Conecta con gente, vive nuevas experiencias y luego cuéntalas en tus artículos, seguro que volverás con todo. Un abrazo enorme y gracias por comentar.
Silvia, creo que tiene toda la razón, hay que descansar, física y sobre todo mentalmente, desconectar… aprovechar este parón para reflexionar…
Mi reflexión es: «se trabaja para vivir, no se vive para trabajar». Un abrazo Luis y siempre que puedas busca pretextos para desconectar. ¡saludos!
¡Muchas gracias Silvia! Sin tu ayuda no habría sido posible. Es cierto que he necesitado un tiempo de reflexión y de análisis que me ha servido para conocerme mejor y para crecer. Pienso que esto se refleja en la nueva web de Ruiz de Aloza Editores, y aprovecho para invitaros a todos a conocerla.
Si quieres Editar un libro, Publicar un Libro o Vender un libro, estamos para asesorarte. ¡Llámanos!
Para mí ha sido una experiencia enriquecedora trabajar contigo Gloria y agradezco toda la confianza que has tenido eligiéndome y siguiendo mis consejos. Que tengas muchos, muchos éxitos en esta nueva etapa y te deseo todo lo mejor. ¡Un besote!